Durante la temporada 1998, Marcelo Ríos paseó su tenis genial por Auckland, ganando allí la final al australiano Richard Fromberg, y también disputó el match final del Abierto de Australia. Luego, escaló a las máximas alturas en el Super 9 de Key Biscayne, derrotando a Andre Agassi, obteniendo además el Masters de Roma, Saint Poelten, el Master Series de Indian Wells y la Grand Slam Cup, la que disputan los jugadores con mejor desempeño en los Grand Slam de cada año. Y en el Olympiahalle de la ciudad de Múnich, en Alemania, volvió a encontrarse en el partido crucial con Agassi, a quien derrotó 6-4, 2–6, 7–6 (7–1), 5–7 y 6–3. Esa tarde, el chileno sorprendió al mundo al realizar un legendario smash sentado en el suelo luego de resbalar en la pista germana. Con este título, el Chino sumó once torneos de la ATP, de los dieciocho que alcanzó en una carrera triunfal de diez años, donde el primer campeonato lo consiguió en Bolonia tras batir en mayo de 1995 al uruguayo Marcelo Filippini.